domingo, 29 de enero de 2012

EN UN LUGAR… DE PERALTA

Ha sido una experiencia de lo más estimulante y enriquecedora que he vivido últimamente: ser invitado a la inauguración de la primera “Rockoteca” que se establece en una biblioteca pública del estado español, la Rockoteca “En Un Lugar De La Marcha” de Peralta, en Nafarroa.

Hace ya algunos meses se puso en contacto conmigo Juan Manuel García, responsable de la Biblioteca Pública de Peralta para explicarme su idea de crear un espacio cultural consistente en organizar una biblioteca audiovisual, en la que por un lado se pueda consultar, leer y tener en préstamo libros cuya temática básica sea el mundo del rock y todas sus ramificaciones, -algo no muy habitual por desgracia en muchísimas bibliotecas públicas- desde biografías de músicos y grupos a métodos técnicos para aprender a tocar instrumentos, ensayos, libros de fotos, colecciones de revistas musicales, etc. así como discos de rock, videos, dvs´s y todo tipo de soportes, relacionados siempre con el rock.

La idea me pareció tan buena y Juanma me transmitió su entusiasmo y su ilusión por el proyecto con tal convicción que de inmediato me puse a su disposición para ayudar a desarrollar el proyecto en todo lo que fuera preciso y poco tiempo después, me invitaba oficialmente a presentar mis libros (Barón Rojo, Rolling Stones, Metallica, Led Zeppelin, etc.) en la Rockoteca, que se inauguraría con una charla coloquio que daríamos allí junto a mi amigo el fotógrafo Domingo J.Casas, quien además de ceder unas magníficas fotos de Pink Floyd a la Rockoteca, presentó allí conmigo una exposición fotográfica de 30 años del rock estatal, junto a otros buenos amigos, la gente de Insolenzia, que en plena gira de presentación de su último disco-libro ‘Me Quema El Sabor De Tus Ojos”, hicieron un concierto acústico alli al terminar nuestra charla. Además de una nutrida cantidad de gente interesada por esta iniciativa, tuve el placer de saludar allí a Alfredo de Barricada y a Aurora de Tahúres Zurdos, que vinieron a la presentación y pasaron un rato magnífico allí con todos nosotros. También Pere Homs, el director de mi editorial, Quarentena Ediciones de Barcelona, se desplazó allí para ofrecer un stand de novedades editoriales –Historia del Rock Japonés, El Shock Rock, Bruce Springsteen en España, etc.- y para cerrar un acuerdo de cooperación con la Rockoteca.

Además del excelente trato que tanto Juanma como sus amigos de la Asociación Cultural Minnuendo, unos auténticos locos del rock sinfónico y progresivo que también están haciendo una excelente labor como promotores de conciertos por toda la zona nos dispensaron, y lo agradable que resulta conocer nuevos amigos y hablar con ellos sobre música, discos, libros y proyectos, conocer a gente que comparte esa pasión por la música y que tiene ganas de hacer cosas, de involucrarse en iniciativas para apoyar la música desde un espacio público como puede ser una biblioteca, y además hacerlo frente a una magnífica comida regada con buen vino de la tierra y unos excelentes pacharanes, me ha parecido muy importante dar el máximo apoyo y la mayor difusión posible a una iniciativa como esta por muchas razones, pero fundamentalmente por una En un momento tan aciago como el actual, en el que desde todas las administraciones públicas se está acometiendo unos recortes de toda clase de inversión pública de proporciones descomunales, y siendo la inversión en cultura la primera a la que se le ha sometido al tijeretazo, es todo un ejemplo a seguir – o debería serlo- el hecho de que un Ayuntamiento como el de Peralta siga apoyando la cultura musical cediendo un espacio público para la creación, la lectura y el intercambio acerca de una manifestación cultural como el rock, nunca apoyado por las instituciones oficiales. Los impulsores de la Rockoteca han entendido que el rock es no solo un estilo musical con más de medio siglo de historia y trayectoria cuya proyección social y mediática en todo el mundo es innegable, sino que a lo largo de esos más de 50 años ha creado unas referencias estéticas, un arte, una filosofía de vida, unos iconos, que lo han convertido en una cultura con una personalidad propia, una presencia global en el mundo y cuya proyección en el mundo de la fotografia, el cine, la literatura, la moda, el diseño, y muchísimas más ramas de la cultura es de primerísimo orden.

Desarrollar esta idea, difundirla, y dotar con ello al rock del reconocimiento cultural que merece es una tarea en la que yo personalmente estoy totalmente implicado, y comprobar como desde la base, desde una asociación cultural y desde el trabajo honesto y dedicado de personas del entorno público como Juanma, se pueden crear espacios y plataformas para trabajar en esa dirección, no puede resultarme un motivo de mayor satisfacción. Para todos los interesados en conocerla mejor, esta situada en la Biblioteca Pública de Peralta, C/ Tremoya, 3 (Casa de Cultura) 31350 Peralta-Azkoien (Navarra) y su número de teléfono es el 948 75 32 10

Ojalá que las actividades de la Rockoteca continuen a buen ritmo y ojalá que muy pronto pueda volver por allí.

martes, 10 de enero de 2012

EVOLUCION, TECNICA E IMAGINACION: EL ROCK PROGRESIVO (I)


El Rock Progresivo (progressive rock, prog-rock) nace como género musical dotado de una personalidad y de unas características propias en torno al año 1970. Como en otros casos, bien por la experimentación instrumental y la evolución musical de algunos grupos preexistentes, como por el incipiente éxito de bandas que desde el primer momento van a cultivar esta nueva forma de entender el rock, ya desde finales de la anterior década existe una tendencia que es en este año cuando va definitivamente a cristalizar en un nuevo estilo.

El adjetivo progresivo alude tanto al carácter innovador que tuvo inicialmente el género (concebido como un paso adelante en el progreso, sobre todo a nivel compositivo y técnico de la música rock) como a la importancia que concede a la progresión musical: uno de sus clichés más característicos es el paso gradual, progresivo, de una sonoridad bucólica (acústica, medievalizante, folk, modal, de tempo lento) a otra urbana (eléctrica, tensa, acelerada, con influencia del blues y del jazz). Las composiciones progresivas se caracterizan principalmente por el uso de movimientos, como en las obras de música clásica, la adición paulatina de nuevos instrumentos que van desarrollando el conjunto de la pieza y la improvisación, cercana a menudo a los cánones del Jazz.

Se pueden considerar entre las características más importantes del género la abundancia de canciones largas, álbumes conceptuales, un acusado virtuosismo de los instrumentistas, y un uso prominente del melotrón y otros sintetizadores. Del mismo modo, fundamentalmente en la estructura de las composiciones existe una notable influencia del minimalismo, en tanto que es muy frecuente encontrar en los extensos temas de los grupos progresivos un elemento de carácter repetitivo e hipnótico, potencialmente inductor del trance. En este sentido, el rock progresivo conecta, en opinión de cierto sector de la crítica musical, con la psicodelia del periodo 1966-67 pudiendo considerarse muchas composiciones del género como música creada para acompañar el viaje psicodélico o reproducir, sin ayuda química, su estructura y efectos. Una línea de evolución desde el pop psicodélico hacia el rock progresivo se constata así claramente en grupos como Pink Floyd o The Moody Blues y aunque no todos estos rasgos se dan siempre, constituyen una constante en las bandas que establecieron el género, como Genesis, Emerson, Lake & Palmer y Yes.

Aunque es muy difícil en ocasiones establecer la diferencia dada la evidente proximidad entre ambos estilos, el rock progresivo es un estilo diferente del convencionalmente llamado rock sinfónico. El adjetivo, la consideración de grupo de rock sinfónico no viene dada tanto por las características antes aludidas del progresivo, sino por la sonoridad orquestal, las melodías y armonías ampulosas y una influencia más acusada en ese sentido de la música clásica más que del minimalismo. Canciones como “She's Leaving Home”, de los Beatles, “Nights In White Satin”, de The Moody Blues, o “A Salty Dog” de Procol Harum, mediante el uso de secciones de cuerda u orquestas completas, pueden considerarse como precedentes del Rock sinfónico.

En 1969 uno de los discos de mayor éxito en todo el mundo y que marcó claramente una de las líneas maestras de evolución que el rock progresivo seguiría, fue el legendario debut de King Crimson con su ‘In The Court Of King Crimson.

Contra todo pronóstico, y a pesar de varios cambios de formación –entre ellos la marcha de Greg Lake para formar E,L&P- King Crimson reafirman y avanzan sobre lo hecho en su magna obra de debut en un segundo disco igualmente excepcional y que marcha un hito en el prog-rock: ‘In The Wake Of Poseidon’

Caso similar resulto ser el de Jethro Tull. Su álbum de 1969, ‘Stand Up’ fue otra de las revelaciones de año, obtuvo ventas muy por encima de lo esperado y la crítica hablaba del disco en términos muy elogiosos por la innovación y la originalidad que Ian Anderson había conseguido en la práctica totalidad de las canciones del álbum. Ese espíritu ecléctico, en el que sobre una base de rock clásico muy standard elementos del folk y del blues creaban una atmósfera musical realmente singular, se repitió en su álbum de 1970, ‘Benefit’. Un disco que no logró igualar los buenos resultados de ventas de ‘Stand Up, aunque su calidad es innegable y fue el telón de una exitosa gira por Estados Unidos durante el verano de aquel año.

En el mundo del rock progresivo se dio el primer caso de lo que con frecuencia la prensa musical denominaba un “super grupo”, y este no fue otro que Emerson, Lake & Palmer. El teclista Keith Emerson venía de The Nice, el bajista Greg Lake de King Crimson y el batería Carl Palmer de Atomic Rooster. Incluso, en la primavera de 1970, cuando el grupo se estaba formando y haciendo sus primeras sesiones y ensayos, hubo charlas y contactos con Jimi Hendrix para que se uniera a ellos. Hubo algunos periodistas ingleses que se atrevieron incluso a adelantar que el nuevo supergrupo se llamaría HELP (Es decir, tomando la inicial de cada uno de sus miembros, Hendrix, Emerson, Lake & Palmer) aunque finalmente tal proyecto no se llevaría nunca a cabo.

El debut discográfico del trío fue el excelente álbum ‘Emerson, Lake & Palmer’, otra de las obras maestras del rock progresivo, en la que junto a la famosísima balada “Lucky Man”, el grupo grabó piezas de un virtuosismo y de un barroquismo extraordinarios, como la adaptación de una composición para piano de Bela Bartok titulada “The Barbarian” o el no menos elaborado “The Three Fates”.

Emerson Lake & Palmer lograron alcanzar un éxito comercial casi inmediato con este disco de debut. Pero antes de su edición en diciembre de 1970, tal fue la expectación creada en torno a ellos que actuaron aquel verano en el Festival de la Isla de Wight y realizaron durante el mes de septiembre una celebrada gira europea, en el marco de la cual grabaron un especial para televisión para el programa “Beat Club” de la Televisión alemana aún sin haber editado su primer disco.